• Éste fue promovido por la Fundación y  buscaba que no se pudiera invocar la libertad de enseñanza para discriminar a niñas, niños y adolescentes en los distintos establecimientos educacionales.
  • Iguales intervino en el 2º trámite del proyecto para intentar impedir que el Senado desestimara el resguardo antidiscriminación que había sido aprobado en la Cámara; todo en el marco de la discusión sobre la Reforma Educacional. En esa oportunidad se acogió la posibilidad de acogerse a la Ley Zamudio para evitar discriminaciones arbitrarias.

 

La Fundación Iguales, como defensora del artículo (N°1, N°7, letra C), que buscaba que no se pudiera invocar la ley de libertad de enseñanza para discriminar a los niños/as y adolescentes en los establecimientos educacionales del país, lamenta profundamente la determinación adoptada por el Tribunal Constitucional (TC) de declararlo inconstitucional.  Para la organización, la ya cuestionada legitimidad del TC, se ve incrementada con esta decisión que invalida la votación de una institución democrática como es el Congreso Nacional.

El presidente de la fundación Iguales, Luis Larraín afirmó que “entendemos que en este caso hay una colisión de derechos entre el principio de igualdad y no discriminación y la libertad de enseñanza. Sin embargo, parece arbitrario simplemente superponer uno de ellos frente al otro”.

La fundación cree que los niños, niñas y adolescentes tienen el derecho a ser educados sin importar su orientación sexual, la de sus padres o la identidad de género de cualquiera de ellos. Según lo planteado, con esta decisión sólo se está perpetuando y replicando un sistema discriminador.

Según Larraín, “el ministro Cristián Letelier debió haberse inhabilitado de votar este aspecto después de haber señalado que ‘los homosexuales son desviados’. Esto revela que, finalmente, estas decisiones están fundamentadas en prejuicios y percepciones individuales más que en el apego a la Constitución”.

Iguales hace un llamado al Ministerio de Educación a buscar la fórmula para frenar este tipo de discriminación y a crear otras instancias donde se resguarden estos derechos. A diario en Chile se discrimina a niños/as por pertenecer a la diversidad sexual y una reforma educacional era la oportunidad precisa para revertir esta situación.

Por último, si bien la Ley Zamudio podrá seguir invocandose, está comprobado que es una norma incompleta, que pone el peso de la carga de prueba sobre la víctima y que finalmente concluye en muy pocas sanciones efectivas. Por eso y por decisiones como la recién tomada por el TC, como Iguales pedimos al Gobierno que haga los cambios estructurales a los que se comprometió y mejore su efectividad real.