Daniel Zamudio, un joven gay de 24 años, recibió este fin de semana una brutal golpiza por parte de un grupo de neonazis, quienes grabaron suásticas en su cuerpo y arrancaron parte de su oreja. Daniel se encuentra en estado de coma, internado en la Posta Central de Santiago.

Repudiamos este acto cruel que atropella la igual dignidad de todos los seres humanos. Pedimos a las autoridades chilenas hacerse parte de las acciones legales destinadas a castigar a los culpables. Un crimen de esta odiosidad no puede quedar impune. Les pedimos además que pongan urgencia a la Ley Antidiscriminación, para brindar protección a todos los ciudadanos sin importar raza o etnia, nacionalidad, situación socioeconómica, idioma, ideología u opinión política, religión o creencia, sindicación o participación en organizaciones gremiales o la falta de ellas, sexo, orientación sexual, identidad de género, estado civil, edad, filiación, apariencia personal, enfermedad o discapacidad.

Una ley no bastará para terminar con el odio. Debemos trabajar unidos para lograr un sistema educacional que forme a nuestros estudiantes en la diversidad y no la discriminación.

Fundación =Iguales