El 24 de octubre pasado una trabajadora, quien se desempeñaba como secretaria de gerencia en la institución bancaria y pidió mantener su nombre en reserva, fue despedida –según asegura- luego de confidenciarle a su jefe directo que uno de sus hijos es homosexual y una persona con VIH.
Esta mañana, en el 2° Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago se llevó a cabo la primera audiencia de conciliación entre la ex trabajadora y el Banco Security. La afectada, quien se desempeñó por seis años como secretaria de gerencia, demandó el 29 de noviembre de 2016 a la empresa por considerar que la habrían despedido de modo injustificado y discriminatorio al enterarse que uno de sus hijos es homosexual y una persona con VIH.
Fue durante 2015 que ella se enteró de que uno de sus hijos había contraído VIH y, a causa de esto y de la preocupación que sintió, fue diagnosticada con depresión. Su estado de ánimo fue el que generó la conversación en la que le contó a su jefe lo que le estaba pasando. “Le confidencié el hecho que uno de mis hijos había contraído VIH. Craso error: desde aquel día, el cambio en el trato del Sr. Hernán Buzzoni fue del cielo a la tierra. Y aquella confidencia, terminó por sepultar la carrera en el banco por la que durante años tanto me había esforzado” aseguró la afectada.
Luego de esta conversación y previo a que se oficializara el despido el 24 de octubre de 2016, ella sufrió acoso laboral por parte de su jefatura directa como se puede leer en su demanda: “el Sr. Buzzoni no sólo evitaba mi presencia por completo, sino que además dejó de trabajar conmigo por completo (sic). Derivó todas las funciones que normalmente me correspondían con él a terceras personas, y contrató a otra secretaria (según él, para ayudarme), quien en la práctica fue absorbiendo todas mis funciones laborales en una maniobra bastante poco sutil por entrenar mi reemplazo”.
Ante este acoso laboral, la demandante buscó cambiarse de sucursal, pero Buzzoni le habría dicho que “no me recomendaría para el traslado, no solo porque había bajado mi productividad, sino rematando con el siguiente epíteto: ‘cómo la voy a recomendar, si tiene un hijo gay y enfermo’. Mi jefe directo me informó a la cara que impediría cualquier posibilidad de trabajar en una sucursal del banco distinta a aquella bajo su cargo, debido a la orientación sexual de mi hijo y su condición de portador de VIH”.
«De acuerdo al relato de la afectada, estamos ante un evidente caso de discriminación laboral por orientación sexual, agravado por la condición de salud de una persona con VIH. Mientras las empresas en el mundo, y también en Chile, avanzan hacia promover la diversidad, acá nos encontramos con un banco que avala que el jefe directo de la trabajadora ejerza acoso laboral no por la orientación sexual de la trabajadora, lo cual ya es condenable, sino de un familiar de ella», dijo el director ejecutivo de Iguales, Emilio Maldonado.
El abogado que lleva la causa, Alan Spencer, explicó que la audiencia no tuvo los resultados esperados y que tendrán una segunda audiencia el próximo 16 de febrero porque “el banco negó los hechos y el que existan políticas discriminatorias en su interior. Se negaron a hacer cualquier forma de reconocimiento de responsabilidad ni aplicar ninguna medida de prevención para que casos así se vuelvan a repetir. El Banco no negó tener conocimiento de la enfermedad de uno del hijo de la afectada”, dijo Spencer.
En la demanda se solicita capacitación y talleres para los/as funcionarios/a del banco, con foco en las jefaturas, disculpas públicas a la afectada en la intranet de la institución financiera y una indemnización por daños morales y discriminación. Además, según comentó Spencer “el tribunal ordenó oficiar Fundación Iguales y Movilh, para que informen al juez si tienen conocimientos de denuncias por discriminación en contra de Banco Security, y si tienen conocimiento de políticas expresas o tácitas discriminatorias por parte de este”.