Señor Director,
No existen palabras para expresar el orgullo que, como integrantes de la diversidad sexual, sentimos ante el triunfo del equipo de Una Mujer Fantástica y en especial de Daniela Vega —una actriz trans— en la última ceremonia del Oscar donde se coronaron como mejor película extranjera y trajeron a Chile su primera estatuilla por un largometraje.
Con gran valentía y profesionalismo Daniela Vega fue la cara visible de la discriminación y dificultades diarias que deben enfrentar las personas trans en nuestro país por no contar con una ley de identidad de género que les permita adecuar sus documentos de identificación, pero esto es un hecho que va más allá de la ficción, pues ella misma viaja a representar a Chile con un pasaporte que no tiene su nombre.
Es irónico que ella ponga a nuestro país en lo más alto del mundo y que, a la vez, nuestros parlamentarios lleven casi cinco años tramitando una iniciativa para darle dignidad a las personas trans y reconocer debidamente su derecho a la identidad.
El premio obtenido el día domingo 4 de marzo, es un rayo de esperanza enorme para todos aquellos niños y niñas trans que aún se encuentran en las sombras sufriendo, muchas veces, sin saber cómo el mundo recibirá la noticia de que son personas trans. Daniela y el equipo completo de la película, les han dicho que ¡Sí se puede!, que ¡La vida es bella siendo tal y como uno es!, y como Fundación Iguales trabajamos para pavimentar ese camino, continuando en la senda de la inclusión, el respeto, la educación y el acompañamiento para todas aquellas personas que lo necesiten.
Álex Contreras
Delegado Iguales Ñuble.
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