La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) reitera su profunda preocupación ante la violencia homofóbica, lesbofóbica y transfóbica en la región y urge a los Estados a adoptar medidas urgentes para prevenir los homicidios y actos de violencia contra las lesbianas, los gays y las personas bisexuales, trans e intersex (LGBTI), y contra cualquier persona percibida como tal.
Durante los meses de octubre y noviembre de 2012, la Comisión recibió información sobre 54 homicidios de personas LGBTI en la región. De este total de asesinatos, la Comisión fue informada que 35 homicidios fueron de personas trans y mujeres transgénero o aquellas personas percibidas como tales, ocurridos en: Argentina (1), Bolivia (1), Brasil (20), Estados Unidos (2), Honduras (1), México (8), Nicaragua (1), y República Dominicana (1). Asimismo, la Comisión recibió información sobre 15 asesinatos de hombres gay o percibidos como tales durante estos dos meses, ocurridos en Brasil (12), México (2) y Nicaragua (1). Finalmente, la Comisión también recibió información sobre 4 homicidios de mujeres lesbianas o percibidas como tales, ocurridos en Brasil (3) y Ecuador (1).
Por otra parte, durante los meses de octubre y noviembre, la Comisión continuó recibiendo alarmante información acerca de otras violaciones de derechos humanos a las personas LGBTI. En particular, la CIDH fue informada de ataques contra la integridad personal, incluyendo graves actos de violencia por parte de particulares; actos de violación sexual «correctiva» de mujeres lesbianas; y situaciones de abuso policial y detenciones arbitrarias, en particular de mujeres trans. Asimismo, la CIDH observa con preocupación las denuncias que ha recibido en relación con violaciones a derechos humanos de personas privadas de libertad que son LGBTI.
La Comisión recuerda que es obligación de los Estados investigar hechos de esta naturaleza y sancionar a las personas que resulten responsables. La Comisión insta a los Estados a abrir líneas de investigación que tengan en cuenta si estos asesinatos fueron cometidos en razón de la expresión de género, la identidad de género o la orientación sexual de las víctimas. En general, la Comisión observa que existen problemas en la investigación de estos crímenes. Al respecto, la Comisión reitera que la inefectividad de la respuesta estatal fomenta altos índices de impunidad, los cuales a su vez propician su repetición crónica, sumiendo a las víctimas y a sus familiares en la indefensión.
La CIDH urge a los Estados a adoptar acciones para evitar y responder ante estos abusos a los derechos humanos y garantizar que las personas LGBTI puedan ejercer efectivamente su derecho a una vida libre de discriminación y violencia, incluyendo la adopción de políticas y campañas públicas, así como las reformas necesarias para adecuar las leyes a los instrumentos interamericanos en materia de derechos humanos.
La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos y elegidas por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.