Santiago, 11 de septiembre de 2011
Las palabras del pastor Hédito Espinoza en contra de la diversidad sexual son fruto de la ignorancia y los prejuicios.
La ignorancia consiste en confundir la orientación sexual con crímenes como la pedofilia y el incesto, o con comportamientos deshumanizantes como la zoofilia.
Invitamos a los creyentes evangélicos a informarse del consenso científico que hoy existe al respecto: la orientación sexual minoritaria es tan normal, sana y fuente de realización para las personas, como la mayoritaria.
La criminalización y patologización de la homosexualidad es una práctica habitual para incitar al odio y al atropello de los derechos de las personas que forman parte de la diversidad sexual. En Chile, ya habían incurrido en ella el senador Carlos Larraín y el cardenal Medina. En un día tan significativo para la lucha por los derechos humanos como es el 11 de septiembre, el discurso del pastor Espinoza se vuelve especialmente doloroso.
Creemos que es urgente perfeccionar y aprobar el proyecto de ley antidiscriminación y reflotar el que establece medidas en contra de la incitación al odio, incluyendo referencias explícitas a la orientación sexual y la identidad de género.
Esperamos además que las autoridades tengan en cuenta la amenaza que revisten discursos de esta índole para el desarrollo de nuestro país. La diversidad significa riqueza social, en oposición a la pobreza que trae la uniformidad.
La Fe no puede servir de excusa para acusar de criminal o de enfermo al que es diferente. La Fe no puede servir al odio.
Directorio Fundación =Iguales
Fotografía © redevangelica.cl